2000.03.18
ZOOLOGÍA

Descubren en La Gomera un lagarto gigante que se creía extinguido hace 500 años

MADRID. (Redacción.) - Un equipo de expertos del departamento de Biología Animal de la Universidad de La Laguna y de la Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente de la Comunidad Autónoma de Canarias han encontrado una población viva de lagarto gigante en la isla de La Gomera.

Los lagartos descubiertos corresponden a la especia "Gallotia gomerana", que se consideraba extinguida desde hace 500 años, y está directamente emparentada con otros lagartos del género "Gallotia" en Tenerife y El Hierro. Precisamente, el lagarto gigante de El Hierro, el de mayor envergadura de todos ellos, ha sido objeto en los últimos años de un importante esfuerzo de conservación, dado que su exigua población, dos centenares de ejemplares confinados en una peña solitaria, es sumamente frágil.

En La Gomera sólo se han encontrado hasta el momento -las prospecciones empezaron en junio- seis ejemplares, lo que lo convierte en uno de los reptiles más amenazados del mundo. Para garantizar su preservación, la comunidad autónoma Canaria ha puesto en marcha un plan para el control de depredadores introducidos y un programa de cría en cautividad en el Valle de Gran Rey. De hecho, los seis ejemplares descubiertos han sido todos capturados y su emparejamiento crea serias dudas, sin descontar los problemas derivados de la consanguineidad. Por ello se han iniciado nuevas prospecciones para encontrar más ejemplares. El mismo equipo científico lleva varios meses prospectando las zonas más adecuadas para la especie en la isla de La Palma, donde se tiene noticia de la existencia de lagartos gigantes hasta pocos años después de los colonizadores peninsulares.

El lagarto recién descubierto mide unos 50 centímetros de longitud, fue descrito en 1985 a partir de los trabajos de Hutterer con restos conservados de la especie y se teme que no queden más de veinte ejemplares en libertad. El proyecto de búsqueda de estos lagartos se inició en noviembre de 1998 y ha costado diez millones de pesetas.

2000.04.09

El misterio de los lagartos gigantes

El descubrimiento del gran lagarto de La Gomera ultima el puzzle de la colonización de este reptil en Canarias

Antonio Cerrillo, Barcelona

El equipo de biólogos de la Universidad de La Laguna (Tenerife) que acaba de descubrir una nueva especie animal que se creía extinguida desde hace 500 años, el gran lagarto de La Gomera ("Gallotia gomerana"), no puede disimular su gozo. "A estas alturas, resulta sorprendente un descubrimiento de este tipo, que nos ayuda a explicar la colonización de las islas Canarias", explica Manuel Nogales, el director del equipo que ha capitaneado el trabajo. La alegría es mayor si se considera que únicamente se han encontrado seis ejemplares y que existe la convicción de que se ha llegado a tiempo de conocer la naturaleza de este animal cuando estaba presumiblemente a punto de desaparecer de la faz de la Tierra.

El equipo de biólogos se planteó el posible descubrimiento del lagarto gigante de La Gomera en un intento de hallar nuevas variantes del lagarto de Canarias ("Gallotia"), un genero endémico de estas islas. A este fenómeno los expertos lo denominan "radiación adaptativa". Y consiste en la constatación de que históricamente cuando determinadas especies llegan a unas islas (por ejemplo, las Galápagos, Hawai o Canarias) y las colonizan, el aislamiento geográfico, su adaptación y evolución les hace diversificarse hasta convertirse en especies diferentes. Es lo que de nuevo ha quedado demostrado ahora.

Los científicos ya habían tomado nota de la presencia del lagarto gigante canario en la isla de Hierro, en donde fue redescubierto en 1975. El animal medía 71 centímetros de longitud. En cambio, en las demás islas occidentales no se había encontrado ningún ejemplar vivo de estas características. En Tenerife, La Palma y La Gomera sólo se tenía constancia de los lagartosgigantes por la presencia de huesos fósiles, pero ningún rastro concreto de vida.

Un nuevo paso clave para completar el puzzle se consiguió en 1996, cuando este mismo equipo encontró ejemplares del animal en Tenerife. Fue un hallazgo en un lugar inverosímil. El animal, no tan grande como su pariente de El Hierro, fue encontrado en los riscos del acantilado de los Gigantes, en unas paredes verticales de unos 900 metros perpendiculares al mar. Buscaban unas aves marinas y se encontraron con grandes excrementos que les pusieron sobre la pista.

Desde 1996, venían intentando concertar un proyecto de investigación con el Gobierno canario y el Ministerio de Medio Ambiente para encontrar el animal en La Palma y La Gomera. Hasta que el pasado mes de mayo se pusieron manos a la obra... y "¡saltó la liebre!", como dice con júbilo Nogales.

El hallazgo resultó especialmente sorprendente, puesto que los seis ejemplares encontrados (tres hembras, dos machos y un juvenil) "no tienen nada que ver con los anteriormente descubiertos".

Sorprende el escaso número de animales encontrado, que complica su viabilidad futura. Nogales y sus compañeros (Aurelio Martín, Alfredo Valido y Juan Carlos Rando) creen que debe haber más animales; pero todo indica que, en cualquier caso, la población de lagarto será muy reducida. Durante la campaña, llevada a cabo el verano pasado, llegaron a colocar más de 30 trampas diarias y actuaron en más de 70 localidades de la isla. Al final, sólo en un punto se cosechó el éxito. El lagarto gigante se inmovilizó en unos terrenos abruptos, en los casi inaccesibles barrancos que caracterizan la atormentada geología de la isla. "Puede que haya más animales, pero la población está muy mermada", sentencia Nogales.

Otro problema crucial que dificulta la viabilidad de esta especie en esta zona radica en el hecho de que en ella abundan los gatos asilvestrados, a los que los lagartos les despiertan un enorme apetito. Además, estos gatos cimarrones son muy prolíficos, por lo que son una amenaza directa para los escasos reptiles que puedan sobrevivir.

Por esta razón, el grupo de biólogos ha solicitado proteger y criar los lagartos en terrarios (ya que dejados en plena naturaleza difícilmente serían controlables) y, por otro lado, ha reclamado medidas para reducir el número de gatos mientras se buscan nuevos ejemplares.

Al éxito y la alegría por el descubrimiento realizado, le ha seguido la polémica sobre el destino de los animales. La viceconsejería de Medio Ambiente de Canarias había previsto inicialmente mantener los lagartos en un terrario en Tenerife, en un recinto con luz artificial, lo que enojó a los científicos. "Exportamos nuestro sol a medio mundo con los turistas que vienen aquí y a los lagartos les ponemos luz artificial...", se llegó a quejar Nogales.

Las malas condiciones en que se alojó inicialmente al animal en Tenerife han podido provocar que uno de los dos machos sufra una grave parálisis en las extremidades posteriores, lo cual le imposibilitará para realizar la cría en cautividad esta próxima primavera; incluso, se teme por su vida.

Finalmente, la decisión ha sido alojar a los animales en un terrario en su isla natural, en La Gomera y con la luz natural, con la esperanza de que puedan criar en cautividad. Los animales vivirán en un recinto cerrado (de unas dimensiones de 4 por 3 metros), a diferencia de los de Tenerife, en donde su hábitat de difícil acceso les mantiene protegidos.

Y mientras, la satisfacción predomina. "Si este proyecto lo hubiéramos retrasado diez años, hubiéramos llegado tarde y no hubiéramos encontrado al animal. Ahora, aún estamos a tiempo de salvarlo", dice Nogales.

La última pieza del puzzle será encontrar el lagarto de La Palma. A pesar de que se han explorado más de 60 localidades, hasta ahora no ha habido suerte. Las delicadas relaciones actuales con la viceconsejería canaria de Medio Ambiente complican las posibilidades de obtener nueva financiación del Gobierno regional, aunque aún confían en reanudar la colaboración. Otra posibilidad sería que el Ministerio de Medio Ambiente les dé el espaldarazo definitivo para seguir la búsqueda.